
En Arcos Dorados el trabajo híbrido ha sido una de las transformaciones más significativas en los últimos años. Adoptamos este modelo para aprovechar lo mejor de ambos mundos: la cercanía y el contacto directo de la presencialidad, y la flexibilidad del home office. Este modelo, que se adapta a las necesidades de nuestros equipos, permite mantener la cercanía sin sacrificar el equilibrio entre la vida personal y la profesional de nuestros colaboradores.
En toda la región de Latam y el Caribe, contamos con más de 100.000 colaboradores, de los cuales el 64% son jóvenes entre 16 y 24 años, muchos de ellos en su primera experiencia laboral y cursando estudios.
Esta audiencia joven, digitalmente conectada y activa en redes sociales, representa un desafío para diseñar estrategias de Comunicación Interna ágiles, accesibles y cercanas.
En nuestros restaurantes, donde atendemos a más de 4 millones de clientes al día, los equipos de Operaciones trabajan de manera presencial, con horarios flexibles y part time. Por su parte, el staff tiene modalidad híbrida, que promueve la “presencialidad con propósito”, combinando el trabajo en equipo presencial con la flexibilidad del home office.
Para nuestra audiencia principal, utilizamos Instagram como uno de nuestros canales de Comunicación Interna, ya que es la plataforma más utilizada por ellos. Instagram nos ofrece herramientas útiles como moderación en tiempo real, métricas detalladas y la posibilidad de generar contenido por parte de nuestros colaboradores (User Generated Content – UGC). Este enfoque bidireccional nos permite interactuar sin interrumpir la experiencia digital habitual de los colaboradores, además de facilitar la creación de contenido auténtico, lo que incrementa el compromiso y la participación.
Al ver los resultados del Diagnóstico de Comunicación Interna 2025, el 68% de las empresas en Latinoamérica han implementado modelos híbridos, pero solo el 45% de los colaboradores siente que la Comunicación Interna es efectiva en este esquema. Esto nos confirma que, en Arcos Dorados, vamos más allá de habilitar el trabajo remoto, creamos una estrategia de comunicación que garantiza conexión y pertenencia.
Por eso, el principal reto ha sido generar engagement, ya que el tiempo de atención de nuestra audiencia es breve y su consumo de contenido es rápido. Creamos mensajes concisos y atractivos que logran captar su atención de manera eficaz.
Aunque el trabajo híbrido ha incrementado la necesidad de fortalecer la Comunicación Interna en muchas empresas, para nosotros ha sido una oportunidad de innovar y acercarnos aún más a nuestros equipos.
A través de una estrategia omnicanal, hemos aprendido a personalizar nuestros mensajes y adaptar nuestras herramientas digitales para mantenernos conectados con todos, ofreciendo información clave en tiempo real. La descentralización del trabajo, que plantea desafíos en cuanto a la alineación organizacional y cultural, nos ha llevado a fortalecer nuestra cultura a través de canales digitales y espacios de interacción virtual.
Una reflexión para profesionales de la comunicación
El trabajo híbrido ha llegado para quedarse. No es una moda pasajera, sino un nuevo estándar que exige una adaptación continua.
En mi experiencia como profesional de Comunicación Interna, he comprendido que la clave radica en encontrar el equilibrio entre la cercanía humana y la flexibilidad digital. Este modelo, más allá de una mera reorganización laboral, es una oportunidad para innovar y conectar a los colaboradores de una manera auténtica y personalizada.
Hoy, más que nunca, la Comunicación Interna debe ser dinámica, centrada en las personas y adaptada a sus necesidades. El trabajo híbrido amplifica el desafío de crear estrategias de comunicación efectivas, pero también abre la puerta a nuevas formas de relacionarnos con los equipos. Como profesional de CI, entiendo que nuestro trabajo no solo es transmitir mensajes, sino también construir una experiencia organizacional que fomente el sentido de pertenencia y fortalezca la cultura.
La clave está en escuchar a los colaboradores, generar espacios de interacción y hacerlos parte del proceso de comunicación. A través de este enfoque híbrido, he visto cómo podemos mantenernos conectados con nuestros equipos, conocer sus necesidades y seguir creciendo juntos, sin importar su modalidad de trabajo.
El verdadero reto para los profesionales de Comunicación Interna es balancear la tecnología con el toque humano. Las herramientas digitales son poderosas aliadas, pero la verdadera fuerza radica en las personas, sus historias y cómo logramos que cada colaborador se sienta parte del propósito organizacional, sin importar desde dónde trabaje.