Fernando Rial, nuestro líder del área de bots, explica cómo la tecnología, junto con una estrategia innovadora de recursos humanos, puede colaborar con el objetivo de construir comunidad entre colaboradores/as.
Generar conversaciones de valor en un contexto híbrido es un desafío cada vez mayor en el interior de las empresas. ¿Cómo hacemos para reemplazar el encuentro en el coffee, la charla camino a comprar el almuerzo o la vuelta compartida de la oficina? Estas instancias, que hacen del trabajo un lugar social más allá de lo meramente transaccional, se están perdiendo, y está comprobado que la falta de este lugar de pertenencia impacta en la rotación.
Lejos de lo que indican los prejuicios, la tecnología puede ayudarnos a generar esas conversaciones. Esto se implementa, en parte, mediante las redes sociales corporativas, pero lo que está tomando cada vez más fuerza son los bots para comunicación interna. Entre sus múltiples funciones, generan conversaciones, por ejemplo, al avisar a los compañeros que una persona de su área cumple años, a la vez que permiten de una manera simple reconocer a un par, o nos cuentan parte de la historia de la empresa.
Construcción de una comunidad
Tradicionalmente, los chatbots han sido implementados para gestionar consultas frecuentes en áreas como recursos humanos, facilitando respuestas rápidas y eficaces sobre políticas de la empresa, beneficios y procedimientos administrativos. Sin embargo, su potencial va mucho más allá de estas funciones básicas. Los chatbots pueden ser estratégicamente orientados para cumplir una variedad de objetivos organizacionales, como fomentar la comunicación interna, promover el aprendizaje y desarrollo, o facilitar la integración de nuevos empleados.
Uno de los mayores desafíos en la construcción de comunidad es mantener una comunicación fluida y efectiva entre los miembros de la organización. Los chatbots pueden ser diseñados para enviar actualizaciones regulares, recordar eventos importantes y fomentar la participación en actividades de equipo. Por ejemplo, un chatbot puede organizar encuestas rápidas para obtener feedback, promover debates sobre temas relevantes y compartir noticias o logros del equipo.
El aprendizaje continuo es esencial para el crecimiento personal y profesional de los empleados. Los chatbots pueden facilitar el acceso a recursos de formación, recomendar cursos y talleres, así como evaluar el progreso de los empleados en sus objetivos de desarrollo o responder preguntas específicas sobre materiales de formación, creando una experiencia de aprendizaje más dinámica y accesible.
También pueden guiar a los nuevos empleados a través de los procedimientos de inducción, proporcionar información clave sobre la cultura y valores de la empresa y conectarlos con compañeros de trabajo y mentores. Esta asistencia personalizada ayuda a que los nuevos miembros se sientan bienvenidos y apoyados desde el primer día.
Es fundamental garantizar que los chatbots sean capaces de manejar una variedad de dialectos y modismos, lo cual puede ser particularmente desafiante en organizaciones globales. La integración con otros sistemas y plataformas de la empresa también es un aspecto crítico para asegurar una experiencia de usuario fluida.
Todo lo que contribuya a fortalecer la comunidad dentro de la empresa reportará beneficios y mejorará los resultados. En ese sentido, los chatbots son una herramienta que no se puede desaprovechar. Por eso su presencia crece. Los casos exitosos son cada vez más, y las razones para incorporarlos también.